Después de casi diez años de su última visita, la cantante estadounidense Sky Ferreira volvió a nuestro país para presentarse en una mini gira de dos fechas que soló incluyó CDMX y Guadalajara. El show en la Perla Tapatía, llevado a cabo en C3 Stage el pasado 09 de marzo, fue el primer concierto en solitario de la icónica cantautora del hyperpop en México, que venía de una presentación un tanto accidentada el día anterior dentro del marco de la primera edición del Pitchfork Music Festival.
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Y es que el espectáculo de Sky Ferreira en la capital del país pasó por mucha incertidumbre, pues la cantante presentó molestias en la garganta que afectaron sus cuerdas vocales y ocasionaron un retraso de aproximadamente 45 minutos respecto a la hora programada. Al final de cuentas el concierto se realizó y los asistentes le reconocieron que salió a escena.
No obstante, quedaba la duda sobre el concierto a realizarse en Guadalajara un día después en el C3 Stage. Se indicó que Ferreira saldría al escenario a las 9 de la noche. Cuando el reloj marcó esa hora y las luces del recinto seguían prendidas, la incertidumbre se apoderó de los asistentes. Se empezó a escuchar la noticia de lo sucedido en CDMX y obviamente la preocupación era el estado de salud de la cantante, al grado de que algunos empezaron a resignarse con que quizá cancelaría, algunos más optimistas decían que podrían esperar su salida “mínimo a las 11”.
Al igual que en CDMX, el retraso se extendió por 45 minutos y la decepción se estaba percibiendo de manera más pronunciada, pero justo en ese momento la banda de Sky salió al escenario y las luces se apagaron. Sí se armó. Sky Ferreira salió a escena con un termo que dejaba ver que contenía té y el concierto comenzó.
El setlist empezó con "Boys", "24 Hours" y "Don't Forget", dos canciones clásicas y uno de sus más recientes sencillos, respectivamente. La emoción se apoderó tanto de Ferreira como de su público y por momentos se nos olvidó que la garganta de la cantante no estaba al 100%.
Otros emblemáticos temas como "I Blame Myself" y "I Will" elevaron el ánimo de los presentes, mientras que Ferreira seguía bebiendo de su termo y de una botella de agua cada vez que podía, como si con cada trago pudiera recuperar parte de su voz.
Pasando la mitad del playlist se empezaron a notar mucho más las limitantes de Ferreira al cantar, incluso por momentos alejó el micrófono para toser un poco. "Night Time, My Time", "Nobody Asked Me (If I was Okay)" y "Everything Is Embarrassing" nos transportaron una década atrás y en el escenario veíamos a una Sky Ferreira que alentó más al público a cantar sus coros porque su voz ya no daba para más.
Una hora aproximadamente y 19 canciones fue lo que las molestias en la garganta le permitieron cantar a Sky, quien se despidió de su público tapatío visiblemente apenada, pero agradecida porque se le reconoció el esfuerzo hecho durante estos dos días.
Hay artistas y bandas que cancelan por motivos que pudieran parecer menores a los de Ferreira y están en todo su derecho, pero es de reconocer lo hecho por la cantante de hyperpop en noches consecutivas. No todos los artistas se entregan a su público de esta manera cuando se les presenta algún asunto de salud.
El primer concierto en solitario de Sky Ferreira, con todo y la adversidad presentada, fue un éxito y solo esperamos que la cantautora saque un nuevo álbum y, sobre todo, que no vuelvan a pasar casi diez años para verla de nuevo en escenarios mexicanos.