Corría el mes de septiembre de 2023 cuando la banda de metal sinfónico Therion anunció lo que sería un concierto inigualable. “Han pasado 15 años desde que tocamos en vivo con orquesta (en Rumania y Hungría)… Pero ahora es tiempo de hacerlo de nuevo”, escribieron en sus redes sociales.
La ArenaCDMX de la Ciudad de México fue el recinto elegido: “No hay otro país en el mundo que tenga una mayor cantidad de fanáticos que México… Así que era lógico que si lo hacíamos de nuevo (presentarse con orquesta), tendría que ser en la Ciudad de México”. Una enorme oportunidad para los seguidores de La Bestia del país, y la comunidad metalera en general, de presenciar un evento único en el mundo.
Los días siguientes fueron de una gran expectativa. La venta de boletos no comenzó de manera inmediata y todos los que buscaban una entrada se mantenían atentos a toda publicación de la banda, preguntando constantemente el inicio de la venta o visitando el sitio web de la ArenaCDMX para averiguar si ya era posible adquirir las entradas para el concierto a realizarse el 20 de enero de 2024. Hasta que sucedió.
Parecía que estaban regalando las entradas. Los boletos VIP prácticamente se agotaron en horas y, unos días después, ya se habían vendido 6000 boletos, poco menos de la mitad del aforo esperado. El día de la presentación se anunció un sold out que emocionó a todos los asistentes: 14000 personas listas para corear, gritar y sacudir la cabeza en cada tema de la banda sueca. Alea jacta est, la suerte estaba echada para una noche épica.
Llegó la hora: 20 de enero de 2024, poco después de las 9:00 de la noche. Un aviso poco común fue anunciado: silencio. Se le solicitó al público que se mantuviera en silencio durante la interpretación para apreciar de mejor forma el sonido de la orquesta. No hubo quejas, al contrario, la algarabía se hizo presente y no hizo más que alimentar el ánimo de los presentes, impacientes ya por escuchar las notas infernales que La Bestia traía para ellos.
La orquesta Sincrophonia y el ensamble coral Cuicatl fueron los encargados de acompañar a Therion en el escenario, quienes recibieron el aplauso del público apenas salieron: 100 músicos preparados para la sinfonía y hacer retumbar el recinto. Christofer Johnsson, fundador y líder de la banda sueca, brindó unas palabras de agradecimiento antes de comenzar. Aplausos y gritos infernales, “¡Therion! ¡Therion!” era lo único que se escuchaba.
The blood of Kingu fue la canción elegida para el inicio. Tema poderoso y que permitió escuchar desde el primer instante la gran calidad y energía de la orquesta y el coro, y que mantuvieron en cada interpretación. La banda, como lo hace en cada ocasión que se presenta en México, no se guardó nada y dio todo lo que tenía para satisfacer a un público hambriento.
El repertorio consistió en una travesía a lo largo de la vasta trayectoria del grupo. Divididos en dos actos, fueron 20 temas los que hicieron vibrar a toda la Arena: clásicos como The rise of Sodom and Gomorra, Lemuria o Birth of Venus Illegitima; composiciones que usualmente no tienen cabida en presentaciones normales, pero dada tan especial ocasión hicieron su aparación, como Via Nocturna o Draconian Trilogy; Ruler of Tamag y Twilight of the Gods, parte de lo que sería el nuevo lanzamiento de la banda, Leviathan III, hicieron su debut en vivo; y por supuesto que no faltaron Quetzalcoatl, imprescindible en tierras mexicanas, y la mítica To Mega Therion.
Sin duda alguna, el espectáculo rebasó las expectativas. Lleno de juegos de luces y fuego en el escenario, con una orquesta y un coro que dieron una interpretación magistral, como si no existiese un mañana, acompañando al poderío de La Bestia que, más que nunca, le hizo honor a su nombre, devorando a las 14000 almas que se dieron cita en una arena que se convirtió en el mismo pandemonio.
Ha transcurrido un año desde entonces y ahora solo queda en la memoria de los afortunados el recuerdo de tan magnífica y brutal noche… Aunque quizá no por mucho tiempo. Tanto en sus redes, como en el mismo concierto, se anunció que el evento sería grabado y, muy probablemente, distribuido en el futuro. No ha habido ningún comunicado oficial al respecto, pero esperemos que sea una realidad para poder revivir ese momento, para que aquellos que no pudieron asistir sean testigos de lo que se vivió aquel 20 de enero de 2024 y que todos juntos podamos corear “¡Therion! ¡Therion!”.
Texto: Alejandro Martínez Sánchez
Fotografías: Tomadas por German García | IG: @german_garcia_photo